El secretario de Defensa de EE.UU. fue sometido a un primer procedimiento médico el 22 de diciembre, reporta The Guardian
Cliff Owen / AP
La hospitalización del secretario de Defensa de EE.UU., Lloyd Austin, de 70 años, se mantuvo en secreto durante más tiempo de lo anteriormente conocido, informa The Guardian este lunes citando datos del Pentágono.
De acuerdo con la información, Austin fue sometido a un procedimiento médico inicial el 22 de diciembre y fue dado de alta el día siguiente. Más tarde, el 1 de enero, fue internado en el Centro Médico Militar Nacional Walter Reed debido a un dolor intenso.
Anteriormente se reportó que ni el presidente estadounidense, Joe Biden, ni el asesor de Seguridad Nacional de EE.UU., Jake Sullivan, ni otros altos funcionarios de la Casa Blanca estaban al tanto de la situación. La subsecretaria de Defensa, Kathleen Hicks, a quien se transfirieron algunos poderes de Lloyd Austin la semana pasada, tampoco tuvo conocimiento de la hospitalización de su jefe hasta el 4 de enero, cuando se encontraba de vacaciones en Puerto Rico.
Sin embargo, un funcionario del Pentágono afirmó que algunos círculos en la Defensa se enteraron de la situación en fechas anteriores. En particular, se trata del jefe del Estado Mayor Conjunto, el general Charles Brown, quien el 2 de enero fue informado al respecto. Además, se destaca que la demora en revelar los detalles de la hospitalización de Austin se debió parcialmente al hecho de que su jefe de gabinete también estuvo enfermo.
“Podría haber hecho un mejor trabajo”
Mientras tanto, Lloyd Austin comentó la situación en torno a su hospitalización y dio las gracias a los médicos y al personal de enfermería de Walter Reed. “Entiendo las preocupaciones de los medios sobre la transparencia y reconozco que podría haber hecho un mejor trabajo garantizando que la opinión pública estuviera adecuadamente informada. Me comprometo a hacerlo mejor”, aseguró el alto funcionario.
Al mismo tiempo, Austin señaló que asume toda la responsabilidad por las decisiones tomadas sobre la divulgación de información sobre su procedimiento médico. “Estoy muy contento de estar mejorando y espero regresar pronto al Pentágono”, añadió.
“Es inaceptable”
El ocultamiento de la hospitalización de una figura clave de la política militar estadounidense ha generado fuertes críticas en la opinión pública, así como entre funcionarios. Así, el senador Tom Cotton, miembro del Comité de Servicios Armados, exigió a Austin que explicara por qué se demoró en notificar a la Casa Blanca su estado de salud.
“El secretario de Defensa es el eslabón clave en la cadena de mando entre el presidente y los militares uniformados, incluida la cadena de mando nuclear, cuando las decisiones más importantes deben tomarse en minutos”, escribió Cotton en la red social X (antes Twitter) el pasado domingo. El representante de alto nivel del Comité de Servicios Armados del Senado de EE.UU., el republicano Roger Wicker, también condenó el ocultamiento del estado de salud de Austin.
“Me alegra saber que @SecDef [el secretario de Defensa] está en mejores condiciones y le deseo una pronta recuperación. Sin embargo, el hecho es que el Departamento de Defensa ocultó deliberadamente la condición médica del Secretario de Defensa durante días. Eso es inaceptable“, subrayó el funcionario.