Este lunes ha comenzado en el mar Negro la fase activa del ejercicio naval internacional Breeze 2016, del cual participan los países miembros de la OTAN y los Estados de la Asociación para la Paz. Las maniobras, cuyo propósito es mejorar la coordinación en respuesta a la crisis y entrenar las operaciones navales de la alianza, durarán hasta el 17 de julio.
El evento se realizará en aguas territoriales de Bulgaria y en aguas internacionales del mar Negro. Los Estados miembros de la OTAN de la región del mar Negro ―Bulgaria, Rumania y Turquía― participan en los ejercicios, también asistidos por buques de guerra de Grecia y España. El ejercicio implica asimismo a los asociados de la OTAN, Ucrania y Georgia.
Según medios rumanos, en el evento serán empleadas tres naves de Rumania: la fragata Regina Maria, la draga marina Sublocotenent Alexandru Axente y la corbeta de misiles Lastunul. En total en el ejercicio Breeze 2016 participarán 25 buques militares, dos aviones, dos helicópteros y unos 1.700 militares, informa Sofia News Agency.
La reacción de Rusia
En respuesta a las maniobras de la OTAN, Moscú sostiene que la intensidad de la formación de los militares de la alianza cerca de la frontera con Rusia se duplicó en los últimos años. Según el ministro de Defensa Serguéi Shoigú, buques de guerra de EE.UU. y otros países del bloque ingresan con regularidad al mar Negro y al Báltico.
El verano pasado, el Ministerio de Defensa ruso señaló que la OTAN realiza cerca de 150 ejercicios por año cerca de las fronteras rusas, mientras que entre los años 2012 y 2013 solo fueron de 90 a 95.
Foto Cortesía