Brasilia (Xinhua) — El ex presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, afirmó tras conocer la ratificación de su condena por una corte de apelación, que lo que está en juego es la soberanía del país y que el que estuvo en el banco de los acusados fue el pueblo brasileño.
En un acto en la Plaza de la República, en Sao Paulo, ante una multitud estimada por los organizadores en 50.000 personas, Lula dijo que todo lo que ocurre es para impedir su candidatura presidencial, pero “vamos a volver para cuidar de los trabajadores y de los pobres”.
Este miércoles, el Tribunal Regional Federal de la 4ª Región (TRF-4), con sede en Porto Alegre, ratificó por unanimidad la condena de Lula por corrupción pasiva y lavado de dinero y elevó la pena de nueve años y seis meses, a 12 años y un mes de prisión, además de una multa.
“Esto no es un acto en defensa de Lula, es un acto en defensa de la soberanía nacional, este es un acto en defensa de Brasil”, enfatizó.
El ex presidente dijo que nunca tuvo ilusión en el comportamiento del Tribunal de Porto Alegre ni en los jueces, porque “hubo un pacto entre el Poder Judicial y la prensa que decidieron que había que acabar con el PT (Partido de los Trabajadores)”.
“No acepto la mentira por la cual tomaron la decisión. Me dispondría a estar con los tres jueces un día entero para que muestren cuál es el delito que cometí. Quiero que pidan disculpas por las mentiras que están contando desde hace años”, afirmó.
Según el ex mandatario, la elite brasileña “no soportó más el ascenso social de la clase trabajadora en este país”.
“No quiero que nadie esté preocupado sólo por Lula, quiero que tengamos una preocupación con millones de brasileños y sobre todo con aquellos que trabajan y viven de salario en este país. Quiero que sepan que todo tiende a empeorar cuando ellos consagren la reforma de pensiones (del gobierno de Michel Temer)”, afirmó.
Agregó que la masa salarial se está reduciendo y que hay una pérdida de derechos históricos de los trabajadores.
“El trabajo formal va a dejar de existir, sólo va a haber trabajo intermitente, vamos a perder derechos que conseguimos años atrás. El que está condenado en el banco de los reos es el pueblo brasileño”, alertó.
“Ellos tienen que saber de una vez por todas que Lula es insignificante. Lo grande en este país es la conciencia política del pueblo brasileño”, subrayó.
“Nunca toleraron que un casi analfabeto, un metalúrgico haya hecho el gobierno que dio más aumento de salarios, que más distribuyó tierra. Fueron esas conquistas las que fueron juzgadas”, enfatizó.
Que sepan que no pueden sacar eso de la conciencia de la sociedad brasileña”, agregó.
“Pueden casar (parar) mi derecho de ser candidato, ahora, pero quiero disputar con ellos la conciencia del pueblo brasileño, qué es lo que está en su cabeza. Que ellos se preparen, porque vamos a volver para cuidar de los trabajadores, las mujeres, los negros, los indios”, dijo.
“Que esperen porque nosotros vamos a volver para que este país vuelva ser respetado, y este país va a mostrar que el pueblo pobre no es problema, el pueblo pobre es la solución”, expresó.
Lula dijo además que el próximo viernes pretende embarcar para Etiopía, donde abordará las experiencias brasileñas en el combate al hambre.