
Lugar del crimen.
El hombre había sido recién deportado de Estados Unidos, su amigo le dio posada, después consiguió un empleo, pero lo terminó matando y enterrando en su propia casa.
Lo que había comenzado como un gesto de amistad y solidaridad terminó convertido en una tragedia que ha conmocionado a los pobladores de la colonia Villa Norma, en San Pedro Sula, departamento de Cortés, al norte de Honduras.
De acuerdo con las investigaciones preliminares, Joel, originario de Comayagua, había recibido recientemente a un amigo suyo que acababa de ser deportado desde Estados Unidos.
Movido por la empatía, le ofreció hospedaje y un empleo en una rosquillería local, sin imaginar que días después su vida terminaría en manos de la misma persona a la que intentó ayudar.
¿Cómo le quita la vida a su amigo?
De acuerdo al informe policial, durante el fin de semana ambos hombres salieron juntos, pero Joel nunca regresó a su casa. Su familia, preocupada, reportó su desaparición y organizó una búsqueda junto a vecinos del sector.
Lo más alarmante, relatan testigos, es que el propio sospechoso participó en la búsqueda, fingiendo desconocer el paradero de su amigo. Sin embargo, la verdad salió a la luz este miércoles cuando el cuerpo de Joel fue hallado enterrado en el gallinero de la vivienda de la víctima en la colonia Villa Norma.
El presunto homicida, cuya identidad no ha sido revelada, se dio a la fuga tras el hallazgo, y ya fue plenamente identificado por la Policía Nacional, que mantiene operativos en distintas zonas de San Pedro Sula para capturarlo.
La muerte de Joel ha causado profunda consternación entre sus familiares y vecinos, quienes recordaron que el joven era un hombre trabajador, conocido por su espíritu solidario y su deseo de ayudar a los demás.