El gobierno de Estados Unidos habría llegado a un acuerdo con México para evitar que los migrantes de la caravana en busca de asilo ingresen a territorio estadounidense.
Bajo el acuerdo, los migrantes deberán permanecer en territorio mexicano mientras procesan sus solicitudes en EE.UU.
Según un artículo publicado el sábado en The Washington Post, miembros del equipo de transición del presidente electo de México, Manuel López Obrador, indicaron que han aceptado el plan denominado “Permanecer en México”, pero la Casa Blanca ni el Departamento de Estado de EE.UU. se han pronunciado al respecto.
“Por ahora hemos aceptado esta política de permanecer en México”, dijo en una entrevista al Washington Post, Olga Sánchez Cordero, la nueva ministra del Interior de México, la principal oficial de política exterior de López Obrador, quien asumirá el cargo el próximo 1 de diciembre.
La medida deja atrás el cambio de política anunciado por el presidente Donald Trump de “capturar y liberar” a “capturar y detener” porque ahora los migrantes permanecerían en México a la espera de la resolución de sus casos en las cortes estadounidenses de inmigración.
“La solución a mediano y largo plazo es que las personas no migren”, agregó Sánchez Cordero. “México tiene los brazos abiertos, pero imagínate una caravana tras otra también sería un problema para nosotros”.
El anuncio del acuerdo por parte del gobierno mexicano ocurre luego que el alcalde de Tijuana declaró crisis humanitaria en la ciudad fronteriza con EE.UU. y solicitara ayuda a la ONU.