La fuerte onda tropical que vigilamos ya tiene una mediana probabilidad de convertirse en un ciclón al este del Caribe.
Los modelos meteorológicos han sido más agresivos en su pronóstico y coinciden en que este disturbio puede fortalecerse en aguas del Mar Caribe y representar un alto riesgo para las Antillas Mayores y Centroamérica.
Los residentes de las Antillas Menores, Venezuela, Puerto Rico, República Dominicana, Cuba, Haití, Jamaica, Honduras, Belice, Nicaragua y la Península de Yucatán deben estar vigilantes.
A muy largo plazo, si este sistema finalmente se desarrolla, debe ser monitoreado en América Central.
El Invest 94L continúa produciendo lluvias y tormentas eléctricas desorganizadas a medida que avanza hacia el oeste a 15 mph. Las condiciones parecen favorables para el desarrollo en los próximos días, y podría convertirse en una depresión tropical.