El presidente de EE.UU. ha sancionado a 319 empresas e individuos chinos desde que asumió el cargo
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha batido el récord de su predecesor, Donald Trump, en cuanto al número de empresas e individuos chinos incluidos en la lista negra del Departamento de Comercio del país, mientras las fricciones en aumento entre las dos potencias siguen complicando el comercio global, informó Bloomberg el viernes.
El jueves, el organismo añadió seis empresas chinas más a su lista de entidades restringidas, con lo que el número total de nuevos objetivos durante la Administración Biden asciendió a 319. Esta cifra contrasta con las 306 entidades sancionadas bajo el mandato de Donald Trump, marcado por la guerra comercial con Pekín.
Además de seguir el enfoque de Trump y sus intentos de limitar la industria de semiconductores china, Biden se centró también en las limitaciones que bloquean el acceso de Pekín a innovaciones que podrían encontrar amplias aplicaciones, incluido el crítico sector de la inteligencia artificial. Según Bloomberg, se trata de un ejemplo de cómo el Gobierno estadounidense utiliza cada vez más herramientas económicas para alcanzar objetivos de política exterior.
Alfredo Montufar-Helu, responsable del Centro de China de la organización de grupos de investigación y afiliación empresarial Conference Board, explicó que Biden intenta limitar el acceso de China a la tecnología avanzada de cara a las elecciones de noviembre, ya que ambos partidos “tienen incentivos durante estos meses de campaña para demostrar su fuerza frente a China”.
“Coerción económica e intimidación”
En respuesta, China pidió el viernes a Washington que pusiera fin a la “represión irrazonable” de sus empresas. En una rueda de prensa, el portavoz del Ministerio de Comercio, He Yadong, declaró que el país tomará todas las medidas necesarias para salvaguardar los derechos e intereses legítimos de las compañías chinas que se enfrentan a sanciones estadounidenses. “Se trata de un ejemplo típico de coerción económica e intimidación. China se opone firmemente a esto”, aseveró.
Este viernes, Pekín también anunció sanciones contra dos empresas de defensa estadounidenses, General Atomics Aeronautical Systems y General Dynamics Land Systems, por venta de armas a Taiwán.
Los últimos acontecimientos se suman a las tensiones que han ido en aumento durante la última semana, caracterizada por las acusaciones de EE.UU. contra empresas chinas por su supuesto apoyo a Moscú. Mientras, desde el gigante asiático han señalado en repetidas ocasiones que las relaciones entre China y Rusia son asunto suyo.