Con la entrada del periodo lluvioso viene el mosquito transmisor del dengue y otras enfermedades a Nicaragua.
El dengue y otras enfermedades transmitidas por el Aedes (como Chikungunya y Zika) afectan a 129 países con más de 4 mil millones de personas en riesgo de estas enfermedades en todo el mundo.
El año 2019 fue testigo de un brote de dengue sin precedentes en muchos países de las Américas, con más de 3.1 millones de casos reportados, incluidos 28,176 casos graves y 1,535 muertes.
Las epidemias de dengue tienden a tener patrones estacionales, y la transmisión suele alcanzar su punto máximo durante y después de las estaciones lluviosas.
Según la Organización Panamericana de la Salud (OPS) Cerca de 500 millones de personas están en riesgo de contraer dengue en las Américas.
Médicos clínicos y epidemiólogos alertaron sobre el término sanitario para denominar la coexistencia de dos o más epidemias en una población. La preocupación de sumar la gripe estacional y el dengue entre otras enfermedades.
Pero desde que el mundo conoció al nuevo coronavirus y a la enfermedad COVID-19 que genera, la teoría sindémica debió ser actualizada frente a la pandemia común que atraviesa a todos los países, en donde cada uno de éstos debe también hacer frente a los problemas sanitarios locales o regionales que sufren.
Para muchos de esos países, tener que luchar simultáneamente con dos brotes supondrá un desafío sanitario sin precedentes en la región.
La fiebre del dengue también es una preocupación para otros países de América Latina y el Caribe. En 2019, la región registró más de 3 millones de casos confirmados, según la Organización Panamericana de la Salud (OPS).