“La oposición se ha montado en el barco equivocado, pues, creen que la presión foránea es la que los sentará en la mesa del diálogo”, dijo Cairo Amador, analista político.
A la oposición le hace falta coherencia, del exterior no se arreglan las cosas políticas, es internamente con puntos compartidos, que expresen el sentir de la población.
Amador advirtió que “la oposición día a día se dispersa y se agota”. Esa posición contraria (sin proyecto político) afecta al país en todos los estamentos de la sociedad y principalmente, en el desarrollo económico y social, porque esas contradicciones no acercan posiciones para el diálogo y la convivencia, niegan ese propósito”, precisó.
La oposición aún no se da cuenta que “el gobierno negocia con partidos o representantes coherentes y no lo hace con quienes se contradicen y no se unen en un proyecto de ideas”. Es que la oposición, se monta en el camino equivocado y no avanza en perspectivas del desarrollo del país, concluyó Amador.