La tormenta tropical Otto se convertirá en huracán categoría 1.
Fue decretada la “alerta amarilla” en las todas las comunidades de las regiones del Caribe Sur, Zelaya Central, Chontales y Río San Juan, de cara a la estancia de la tormenta tropical Otto al este de Bluefields, según los últimos reportes del Sistema Nacional de Prevención y Mitigación ante Desastres Naturales (Sinapred) y del Instituto Nicaragüense de Estudios Territoriales (Ineter).
De cara a las altas posibilidades de que la tormenta tropical Otto llegue a ser un huracán categoría 1 en las próximas 48 ó 72 horas, fue activado este nivel de alerta.
Las autoridades calculan que el fenómeno podría estar ingresando al territorio nacional el día jueves con vientos sostenidos de entre 120 y 130 kilómetros por hora, los de un huracán.
El director de Meteorología del Ineter, Marcio Baca, informó ayer que el fenómeno experimentó un leve movimiento hacia el este y se instaló a 550 kilómetros de Bluefields. “Entre martes a jueves muy seguramente va a fortalecerse y alcance una categoría de huracán”, dijo el funcionario.
Indicó que la tormenta tropical tiene vientos de hasta 36 kilómetros por hora que vienen en dirección norte, por lo que se espera que avance “lento pero progresivamente” con ruta al oeste, tocando las costas, para mayor exactitud al sur de Bluefields.
En ese momento del impacto, dijo Baca, ya tendría categoría de huracán con vientos entre los 120 y los 130 kilómetros por hora. Y se comenzaría a debilitar cuando se enrumbe a Ciudad Rama y el Pacífico, para que nuevamente sea tormenta tropical después depresión tropical, explicó el funcionario de Ineter.
De cara a esta formación de la naturaleza, todos los comités regionales, departamentales y municipales del Sinapred estarán en sesión permanente, así como activar los planes de contingencia y de apoyo a familias vulnerables, dijo por su parte el co-director del Sinapred, Guillermo González.
El representante de Sinapred agregó que se estará haciendo una preparación a las condiciones básicas como refugios y albergues. Agregó que ninguna embarcación tiene permitido zarpar en la zona debido a que las olas han estado más fuerte de lo que siempre están.