Al menos 11 de estos personajes “se han beneficiado” de múltiples privatizaciones, concesiones y permisos que les ha otorgado el gobierno en las últimas décadas, dice estudio de Oxfam
Un informe de la organización Oxfam demuestra que la desigualdad extrema de la riqueza en México no deja de aumentar, mientras en el país hay 14 “ultrarricos” cuya fortuna aumentó hasta casi duplicarse desde el inicio de la pandemia.
Estos 14 ultrarricos juntos acumulan cerca de 180.000 millones de dólares y concentran 8,18 de cada 100 pesos de la riqueza privada nacional. Pero, solo la fortuna de dos de ellos, Carlos Slim y Germán Larrea, “creció en 70 % durante los últimos cuatro años, hasta representar casi seis de cada 100 pesos de la riqueza privada en el país”, una cifra equivalente a la riqueza de la mitad de la población más pobre de América Latina y el Caribe, unas 334 millones de personas, detalla el documento.
Primer dato. La fortuna conjunta de Slim y Larrea creció en 70 % durante los últimos cuatro años, hasta alcanzar una fortuna conjunta que equivale a la riqueza de la mitad de la población más pobre de América Latina y el Caribe, unas 334 millones de personas. pic.twitter.com/QCjABY9q2X
— Carlos Brown 🍉 (@cabrowns) January 23, 2024
El mayor patrimonio
Slim es el hombre más rico de América Latina y su fortuna superó por primera vez en diciembre de 2023 los 100.000 millones de dólares. De acuerdo con el reciente texto, tiene un patrimonio mayor que los otros 13 ultrarricos mexicanos juntos.
Según el informe de Oxfam, su fortuna creció en 58 % en términos reales desde el inicio de la pandemia de covid-19 y concentra casi tanta riqueza “como la mitad más pobre de la población mexicana, alrededor de 63,8 millones de personas”. Slim, además, acapara 4,48 pesos de cada 100 pesos de riqueza en México.
Entre los 14 ultrarricos (con más de mil millones de dólares) en México, Slim acumula una fortuna tan grande que es mayor que las otras 13 juntas y es cercana a la riqueza en manos de la mitad de la población más pobre de México, alrededor de 63.8 millones de personas.
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En la nación latinoamericana, asimismo, hay poco menos de 294.000 personas denominadas ricas, que acumulan fortunas de más de un millón de dólares, incluyendo a los ultrarricos. Representan a uno de cada 500 mexicanos y concentran casi 60 de cada 100 pesos de la riqueza privada en el país.
Riqueza y política
El documento de la Oxfam enfatiza que es la “concentración del poder corporativo” la que lleva al aumento de la desigualdad un México y que esa “excesiva” acumulación guarda una “estrecha relación con el poder político”.
Menciona, por ejemplo, que 11 de los 14 ultrarricos mexicanos “se siguen beneficiando de múltiples privatizaciones, concesiones y permisos que les ha otorgado el gobierno mexicano en las últimas décadas”.
Esta excesiva concentración del poder económico guarda una estrecha relación con el poder político: los ultrarricos en México lo son, sobre todo, por décadas de gobiernos que han renunciado a regular su acumulación de poder e influencia.
— Carlos Brown 🍉 (@cabrowns) January 23, 2024
“Las privatizaciones de los años ochenta y noventa del siglo pasado fueron una masiva transferencia directa de riqueza del gobierno a un pequeño grupo de grandes empresarios. En las últimas cuatro décadas, más de 1.000 empresas públicas fueron privatizadas y muchas de ellas quedaron en manos de quienes hoy componen la lista de ultrarricos en México”, dice el texto.
Menciona casos como el de Slim con Telmex, Ricardo Salinas Pliego con TV Azteca, Germán Larrea con Ferrocarriles de México y Roberto Hernández en el sector bancario.
“Con la información pública disponible, encontramos que las empresas de Carlos Slim y su familia se benefician de concesiones en todos los sectores en los que la Constitución mexicana las permite”, detalla el texto.
Precios
Además, el informe indica que la alta concentración del poder de mercado de las grandes empresas, una de las principales fuentes del poder económico, “ha sido como gasolina para el fuego de las desigualdades”.
“Las grandes empresas con poder monopólico tienen la capacidad de fijar los precios en los principales sectores de la economía nacional, en detrimento de los bolsillos del resto de la población. Esto les ha permitido aprovecharse de los choques económicos tras las crisis globales recientes para subir más que proporcionalmente los precios de los productos en los sectores que controlan”, explica.
Como ejemplo de ello, indica que las ganancias de las empresas capturaron el 60 % del incremento en precios de la economía mexicana de septiembre de 2021 a septiembre de 2022, que habría sido el período con el mayor aumento en el costo de vida en las últimas dos décadas en México.
Avances
La Oxfam reconoce que en los últimos años ha habido avances en la política social y salarial, que han mejorado la distribución del ingreso especialmente para las personas trabajadoras formales; se ha reducido la proporción de la población en situación de pobreza multidimensional de 41,9 a 36,3 % y el salario mínimo ha crecido en 65,2 % en términos reales entre 2018 y 2022.
No obstante, considera que “esto no es suficiente cuando las reglas del juego para el resto de la población en México siguen siendo muy distintas a las que rigen a los ultrarricos”.
Por ello, en el documento, la Oxfam propone:
- Romper la relación de conveniencia entre el poder económico y el poder político.
- Revitalizar el rol del Estado mexicano.
- Regular los monopolios, poner impuestos a grandes corporaciones y fortunas personales.
- Reconocer y promover nuevas estructuras empresariales y de propiedad.
“Un México más justo e igualitario es posible si así lo decidimos”, subraya la organización.