La próxima campaña de vacunación solo usará las nuevas fórmulas adaptadas a las variantes predominantes del coronavirus, de la familia XBB
Más de 100 millones de dosis de vacunas contra el covid-19 almacenadas en España que habían sido adquiridas en los últimos años han quedado obsoletas y sin usar, informa el diario El País.
El medio indica que ello se debe a una decisión de la Comisión de Salud Pública del país, que esta semana comunicó que en la campaña de vacunación contra esa enfermedad —que comenzará la última semana de septiembre— solo se usarán las nuevas fórmulas adaptadas a las variantes del coronavirus de la familia XBB, predominantes en la actualidad a nivel global.
Si bien se desconoce cuánto gastó exactamente el Gobierno para comprar estos fármacos, dada la opacidad de los acuerdos comerciales, el Ministerio de Sanidad español presupuestó en 2021 y en 2022 unos 2.348 millones de dólares para vacunas, que se añadieron a los cerca de 1.494 millones iniciales del primer año de la emergencia sanitaria.
Casi 64 millones de dosis fueron adquiridas en octubre de 2022, cuando ya había almacenadas 79 millones sin inyectar y el 81 % de la población mayor de 40 años contaba con los dos pinchazos iniciales y uno de refuerzo.
14 millones de dosis desperdiciadas
Desde entonces y hasta el 30 de junio de este año, se administraron diez millones de dosis. Asimismo, el Ejecutivo compró en 2023 un total de 3,2 millones de dosis adicionales no adaptadas a las nuevas variantes a la farmacéutica española Hipra por, aproximadamente, 3,4 millones de dólares.
Cabe señalar que los acuerdos internacionales no permiten vender o donar vacunas sobrantes que ya estén en el territorio de un país, motivo por el que es muy probable que vayan caducando paulatinamente sin ni siquiera ser utilizadas.
Según los últimos datos del Ministerio de Sanidad publicados a finales de 2022, España ha echado a perder 14 millones de dosis de un excedente de 115 millones que habían recibido y que no llegó a inocular.