Sochi (Rusia) – La canciller alemana, Angela Merkel, y el presidente ruso, Vladimir Putin, se pronunciaron este martes a favor del fortalecimiento del proceso de paz en Ucrania, durante un encuentro bilateral celebrado en la ciudad rusa de Sochi.
“Hay fallas en la implementación pero no en los acuerdos”, dijo Merkel en una conferencia conjunta tras la reunión con su par ruso en la ciudad balnearia.
Putin, por su parte, enfatizó que no hay alternativa a las conversaciones de paz entre Alemania, Francia, Rusia e Ucrania. También ambos mandatarios consideraron a sus respectivos países como importantes aliados.
Merkel llegó el martes a Sochi para entrevistarse con Putin y abordar una serie de crisis internacionales como la de Ucrania y Siria, así como las relaciones entre ambos países y la preparación de la cumbre del G20, que se realizará en la ciudad alemana de Hamburgo los días 7 y 8 de julio próximos.
Durante el encuentro, Merkel también le manifestó a Putin su preocupación por los informes de violencia contra homosexuales, especialmente en Chechenia. El presidente ruso debería “usar su influencia” en esa región para poner fin a los abusos, dijo.
La canciller resaltó además la importancia de proteger la libertad de reunión y de expresarse en público, luego de que cientos de manifestantes fueran detenidos durante las últimas semanas en protestas contra el Gobierno ruso. “El derecho a manifestarse en público es parte de la sociedad civil”, expresó.
Asimismo, Putin defendió a la policía de su país al definirlos como “más reservados y liberales” que algunos de sus contrapartes europeos que usan, por ejemplo, gas lacrimógeno, afirmó.
Sobre Siria, Merkel subrayó que se debe hacer todo lo posible por alcanzar un cese al fuego, por lo que las denominadas “zonas seguras” deben continuar. Putin afirmó que el conflicto en el país árabe no debe ser resuelto sin Estados Unidos.
El encuentro es el segundo de Merkel a Rusia después de que Moscú anexara la región de Crimea en la vecina Ucrania tres años atrás.
Ambos tienen distintas posiciones en el conflicto, donde tropas del Gobierno de Kiev y fuerzas separatistas prorrusas combaten desde hace tres años.
Asimismo, la reunión ocurre una semana después de que el conflicto se cobrara la semana pasada por primera vez una víctima mortal entre los observadores de la Organización para la Seguridad y Cooperación en Europa (OSCE) al pasar un vehículo sobre una mina en la región del Donbás.
Ambos líderes reconocieron que los años de discusiones diplomáticas fracasaron en poner un fin al conflicto.
Putin agregó que debe haber un fortalecimiento del diálogo entre el Gobierno ucraniano y los grupos separatistas que pelean en el este del país. “Es imposible alcanzar una resolución del conflicto sin diálogo directo”, dijo en conferencia de prensa.
Por su parte, Merkel dijo que las sanciones de la Unión Europea contra Rusia podrían ser levantadas si Moscú ayudara a hacer progresos significativos en la implementación de los acuerdos de paz de Minsk.
Ambos mandatarios también minimizaron la posibilidad de una interferencia de Moscú en las elecciones en Alemania, tras las acusaciones por la supuesta injerencia rusa en los comicios de Estados Unidos.
Merkel afirmó que “no pertenece al grupo de los que temen” una posible influencia del Kremlin en las elecciones en su país y dijo estar “confiada” de que los alemanes pueden resolver las elecciones “por sí mismos”.
Putin, por su parte, negó las acusaciones de una presunta interferencia en las elecciones pautadas para el próximo 24 de septiembre, que culminarán con la designación de un nuevo canciller.
“Nunca hemos interferido en la vida política o en el proceso político de otros países”, dijo el presidente ruso.
Asimismo, dijo que espera que ocurra lo mismo con las elecciones rusas en 2018. “Durante muchos años hemos observado intentos de interferir en el proceso político interno de Rusia”, agregó.
Con respecto a la supuesta influencia del Kremlin en las elecciones estadounidenses de noviembre pasado, Putin dijo que era “sólo un rumor que ha sido utilizado en la lucha de poder interno en Estados Unidos”.