El inusual despliegue de naves de guerra rusas tan cerca de EEUU, incluido un poderoso submarino de propulsión nuclear, se produce en medio de las tensiones por el conflicto en Ucrania. Moscú dijo este jueves que no hay motivos para que ningún país se preocupe.
MOSCÚ — El Kremlin dijo el jueves que no había motivos para que ningún país, incluido Estados Unidos, estuviera preocupado por la presencia de buques de guerra rusos en Cuba durante un ejercicio.
Una fragata de la marina rusa y un submarino de propulsión nuclear llegaron al puerto de La Habana el miércoles, una escala que Estados Unidos y Cuba dijeron que no representaba ninguna amenaza, pero que fue ampliamente vista como una demostración de fuerza rusa a medida que aumentan las tensiones por la guerra de Ucrania.
El asesor de seguridad nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan, dijo que no había pruebas de que Rusia transfiriera misiles a Cuba, pero que Estados Unidos permanecería alerta.
Cuando se le preguntó sobre el supuesto nerviosismo en Washington por el temor de que Rusia pudiera transferir personal militar a Cuba o incluso crear una base militar en la isla, el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, dijo que tales ejercicios eran una práctica común.
“Esta es una práctica normal para todos los estados, incluida una potencia marítima tan grande como Rusia”, dijo Peskov a los periodistas. “Así que no vemos ningún motivo de preocupación en este caso”.
La fragata Almirante Gorshkov y el submarino de propulsión nuclear Kazán, medio sumergido con su tripulación en cubierta, llegaron este miércoles a Cuba tras realizar un entrenamiento de “armas misilísticas de alta precisión” en el océano Atlántico.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba dijo que los buques no llevaban armas nucleares, afirmación de la que se hicieron eco funcionarios estadounidenses.