Se trata del tercer sepulcro encontrado en San Juan Ixcaquixtla, en el estado de Puebla, lo que confirma la existencia de un sitio arqueológico de grandes dimensiones
Una tumba de tradición mixteco-zapoteca, que permaneció intacta por más de 1.500 años, apareció bajo una calle en el municipio mexicano de San Juan Ixcaquixtla, en el estado de Puebla, cuando se realizaban unos trabajos de urbanización.
El Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), que lleva a cabo la exploración, informó que la tumba resguardaba “secretos de un rito de culto a los ancestros”.
El equipo de especialistas, coordinado por el arqueólogo Alberto Diez-Barroso Repizo, explicó que San Juan Ixcaquixtla, ubicado sobre una loma que domina un valle, se levantó sobre “un impresionante sitio arqueológico”.
#Entérate 🗞️El Centro INAH Puebla explora tumba intacta por más de 1,500 años, en San Juan Ixcaquixtla.
Es la tercera registrada en el primer cuadro del poblado, lo que confirma la existencia de un sitio arqueológico de grandes dimensiones
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“Aún siguen los hallazgos cuando se efectúan excavaciones, construcciones u obras de infraestructura”, indicó el INAH.
Diez-Barroso detalló que, por la forma y decoración de las vajillas cerámicas, el contexto funerario corresponde al periodo clásico mesoamericano (100-650 d.C.).
“Deposición de múltiples individuos”
“Los entierros forman parte de una tradición mortuoria, en la cual se creaban espacios para la deposición de múltiples individuos, los cuales posiblemente formaban parte de algún linaje de comerciantes-guerreros, por lo cual nos encontraríamos ante un ritual de culto a los ancestros, toda vez que algunas osamentas pertenecen a adultos mayores”, indicó.
El buen estado de la tumba permitirá brindar “un mayor conocimiento sobre la parafernalia funeraria en lo que fue el asentamiento prehispánico”, detalló el instituto.
Hasta el momento, se identificaron dos cámaras de cuatro por dos metros como parte de un complejo funerario mayor. “Las mismas contenían tres entierros con los restos óseos de al menos 20 individuos“, agregó el texto.
En abril de 2004, se produjo el hallazgo de la ‘Tumba1’, que estaba formada “por tres cámaras y una pintura mural extraordinaria”, y hace diez años se descubrió otra en una calle lateral al mercado municipal.